La tele convertida en un gran cubo de basura

La sonrisa del payaso

Jueves, 22 septiembre 2011

Cebrián, ayer miércoles, durante su intervención en el Foro Nueva Comunicación. / Paco Campos (Efe)

Un payaso termina de trabajar, a altas horas de la madrugada, y se dirige a su casa. En un callejón oscuro es asaltado por dos fornidos hombretones que, saltándose el cortejo y sin apenas preliminares, le violan brutal y repetidamente. “Con suavidad, por favor… ¡que la sonrisa es pintada!”, suplica el clon.
Un chiste algo soez y gañán, para qué vamos a engañarnos, que sin embargo viene al pelo para describir las sensaciones que deben estar sintiendo las cadenas de televisión al fusionarse. En la “relación” que acaban de comenzar Telecinco y Cuatro no hace falta que les diga quién es el payaso y quién el agresor. Y para que se hagan una idea del próximo “cruce”, entre La Sexta y Antena 3, solo un detalle: mañana se despide “Tarde Directo”, el programa que hace apenas dos meses llegó a La Sexta tras su paso por La 1 (TVE) con el nombre de “España Directo”. ¿Las causas del cierre? La falta de audiencia y “la necesidad de contener costes en un momento en el que se espera se produzca la fusión con Antena 3 antes de que acabe el año”.
Las televisiones, antaño máquinas perfectas de generar influencias y ganar dinero, lucen sonrisa de payaso. Las mejor dotadas, Telecinco y Antena 3, sodomizan sin misericordia a las más débiles. Y es que el modelo de televisión creado por los socialistas, antes y después del apagón analógico, es una basura. “El Gobierno repartió un montón de licencias que no venían avaladas por proyectos profesionales serios, ni por planes de negocio rigurosos”, asegura en un informe sobre la TDT la web de televisión Vertele.com.
No hay publicidad para tanta televisión. Ni talento para tanta programación. Las cadenas de TDT no sólo no han mejorado la calidad del panorama audiovisual, sino que están en la ruina. Y las grandes cadenas generalistas, lejos de la mayor pluralidad que nos prometió el Gobierno con la incorporación de La Sexta, se fusionan en un desesperado intento por sobrevivir. Tenemos una televisión cada día más pobre, menos plural y con más telebasura… La sonrisa era pintada.
Juan Luis Cebrián, consejero delegado de Prisa, resumió ayer la situación mientras se desmaquillaba y se lamía los desgarros: “La política de Zapatero no ha podido ser más destructiva con los medios… Ha sido infumable el comportamiento del poder político en general, y sin excepción de color, respecto al modelo audiovisual durante las últimas cuatro legislaturas”.
P.D.