Sonrisas de Bombay

lunes, 8 de agosto de 2011

Hablan y no dicen nada, lo reconocen fuera de España

The Economist' define a Rajoy: "El hombre que no tiene nada que decir"

El semanario británico critica al conservador por su falta de definición ante los votantes y los mercados

PÚBLICO.ES 05/08/2011 13:42 Actualizado: 05/08/2011 14:21
 

Captura del artículo de 'The Economist'

Captura del artículo de 'The Economist'
Después de llamar a Rajoy "la pesadilla de un asesor de imagen", el semanario The Economist ha vuelto a dedicar palabras poco agradables al presidente del PP, al calificarle como "el hombre que no tiene nada que decir"
En un artículo titulado ¿Alguien quiere dirigir este país? y publicado este viernes, el semanario británico augura que Rajoy, a quien ya ven en La Moncloa, se enfrentará al "dilema" de "ganar votos aparentando ser moderado" y "ganarse el respeto de los mercados y de Bruselas aparentando ser duro". 

The Economist critica la falta de concreción del conservador cuando asegura que no hará recortes sociales. "El señor Rajoy se ha dado cuenta de que lo que más quieren los españoles son trabajos y una economía fuerte, pero ofrece algo que distorsiona su credibilidad: austeridad sin dolor", indica.
Por este motivo, el artículo insta a Rajoy a "mostrar" cómo piensa aplicar las medidas que dice que necesita España con un Gobierno que, de seguir acortándose la distancia con el PSOE, no tendría mayoría suficiente para gobernar en solitario.

Además, The Economist critica que ciertas Comunidades Autónomas gobernadas por el PP se quejen por el excesivo déficit cuando tienen autonomías como la de Murcia, "históricamente una gran derrochadora".
No es la primera vez que The Economist se refiere a Rajoy. El pasado 16 de junio, el semanario británico tildaba a Rajoy de "hombre misterioso", "un candidato aburrido" y "la pesadilla de un asesor de imagen"
También se refería a sus dos elecciones perdidas asegurando que "no se le da bien echar a líderes perdedores". Para The Economist, Rajoy está jugando a "mirar y esperar" para no "asustar" a los votantes con propuestas drásticas y, de este modo, liquidar el bagaje de "partido desagradable" que provocó, según el semanario, la derrota electoral en 2008. 
Para The Economist, Rajoy era demasiado gallego porque dejaba "a la gente preguntándose cuáles son sus intenciones reales". Una crítica a su falta de definición que hoy ha vuelto ha repetir.  

"Rajoy es un candidato aburrido y la pesadilla de un asesor de imagen"

La revista 'The Economist' presenta al candidato conservador como un "hombre de misterio"

SERVIMEDIA Madrid 18/06/2011 12:31 Actualizado: 18/06/2011 12:50

El presidente del PP, Mariano Rajoy.-

El presidente del PP, Mariano Rajoy.-MARTA JARA

El número de esta semana de la revista The Economist incluye un artículo sobre el Partido Popular y su presidente, Mariano Rajoy, en el que, entre otras cosas, afirma que éste es "la pesadilla de un asesor de imagen" y le advierte de que "esto no es 1996", fecha a la que el PP alude con frecuencia como antecedente de recuperación bajo un Gobierno popular.
El artículo se titula "La gente del Partido Popular" (aprovechando el juego que permite el que, en inglés, "gente" y "pueblo" o "popular" sean una misma palabra), pero presenta un subtítulo más sugerente: "El probable próximo presidente de España es un hombre de cierto misterio". Gane quien gane en 2012, dice, "España será pronto un país para viejos", aplicando así el título de la oscarizada película de los hermanos Coen a la edad de Rajoy y la del candidato socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba.
Al líder conservador, el semanario británico le describe nada menos que como "un candidato aburrido" y "la pesadilla de un asesor de imagen", y, recordando sus dos elecciones fallidas, apunta que al PP "no se le da bien echar a líderes perdedores". Baraja la posibilidad de que Rajoy logre una mayoría absoluta en 2012, pero advierte que los comicios los perderá el PSOE y no las ganará el PP.
Ante el hundimiento económico, The Economist señala que Rajoy está jugando a "mirar y esperar", para no "asustar" a los votantes con propuestas drásticas y liquidar el bagaje de "partido desagradable" que, interpreta, le hizo perder en 2008. Aun así, indica que las "insinuaciones" sobre la quiebra de Castilla-la Mancha y la Sanidad pública parecen igualmente "alarmistas".

Desarrollando el "misterio" que atribuye a Rajoy, el artículo recoge las peticiones que se le han hecho dentro del propio PP de que sea más directo y dinámico en algunos temas, y entiende que su actitud "ha llevado a la frustración acerca de los planes del PP". Tirando de estereotipos, llega a enmarcar la personalidad de Rajoy en el supuesto rasgo gallego que consiste en "dejar a la gente preguntándose cuáles son sus intenciones reales".
Además, la revista señala dos circunstancias concretas que podrían desbaratar la presunta estrategia de Rajoy. Por un lado, su dominio del poder autonómico desde el 22-M podría hacerle aparecer como un corresponsable de la crisis en lugar de como la alternativa en la oposición; por otro, avisa, "esto no es 1996", porque hay "menos empresas públicas que privatizar y no puede contar con el dinero de la Unión Europea".
 
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario